Tom Curren y su hija Lee-Ann surfeando un spot en Miyazaki, Japón, que ya surfeara Tom 20 años atrás y que lleva su nombre, "Curren´s Point". Es bonito como las generaciones se suceden de manera natural.
Tom Curren y su hija Lee-Ann surfeando un spot en Miyazaki, Japón, que ya surfeara Tom 20 años atrás y que lleva su nombre, “Curren´s Point”. Es bonito como las generaciones se suceden de manera natural.